Naomi Klein en el Vaticano: "Los políticos deberán leer la encíclica ecológica del Papa"
La escritora y activista Naomi Klein está «absolutamente asombrada por la valentía y también por la poesía» de la encíclica «Laudato si» («Alabado seas») del Papa Francisco, que presenta los problemas ecológicos con «un maravilloso lenguaje de sentido común», según ha manifestado el miércoles en una conferencia de prensa en el Vaticano.
Naomi Klein ha explicado que su inusitada presencia en el Vaticano se debe a que el Papa ha dirigido su encíclica «no sólo a los católicos sino a todas las personas del planeta. Y puedo decir, como feminista judía no practicante, que ciertamente ha hablado para mí».
La autora canadiense, mundialmente conocida por libros como «No Logo» (2000), «La doctrina del Shock: el auge del capitalismo del desastre» (2007), o «Esto lo cambia todo: el capitalismo contra el clima» (2014), reconoció que la invitación a participar en la conferencia de prensa sobre la encíclica «fue una enorme sorpresa».
Al mismo tiempo, la invitación del Pontificio Consejo Justicia y Paz para intervenir en un seminario sobre estos temas en Roma «demuestra que el Vaticano no tiene miedo, y que ante problemas de esta envergadura hay que crear alianzas. Esta es una alianza en un tema específico, no es una fusión».
La autora advirtió que «nuestros líderes están preparando el lápiz de labios y los zapatos de tacón alto para maquillar otro acuerdo deficiente en la conferencia de Paris COP 21. Yo les digo: ¡Leed entera la encíclica, sin quedaros en resúmenes!».
Tanto Naomi Klein como el científico alemán Ottmar Edenhofer, vicepresidente del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) consideran que el objetivo de limitar el recalentamiento del planeta a 2 grados centígrados es insuficiente.
Por otra parte, todavía no está claro que la Conferencia de Paris (COP21) en diciembre logre acuerdos internacionales vinculantes para limitar suficientemente las emisiones de anhídrido carbónico y gases de invernadero. Según Klein, «a este paso, la temperatura global aumentará cuatro grados», y el sistema económico «no sólo crea el desastre sino que impide tomar las medidas para evitarlo».
Tanto ella como Ottmar Edenhofer han analizado cientos de reacciones a la encíclica del Papa. Según el científico alemán, «lo más sorprendente es que mis colegas ateos y agnósticos han escrito artículos a favor».
El 95 por ciento de los científicos que estudian el clima coinciden en que el calentamiento global es grave y acelerado, pero las continuas campañas de opinión pública por parte de las petroleras norteamericanas y las industrias carboneras crean confusión en torno al mayor problema global de este siglo.
Por otra parte, las actividades de «lobbying» ante parlamentos y gobiernos han conseguido que en estos momentos siga habiendo más subvenciones estatales al petróleo, el gas y el carbón –las causas del «efecto invernadero»– que a las energías renovables.